Los medicamentos anticoagulantes actúan sobre la capacidad de coagulación de la sangre con el fin de evitar una embolia o una trombosis. Son tratamientos indicados para personas que presentan riesgos de padecer estos accidentes de circulación sanguínea.
Los tratamientos están ajustados a cada persona de forma individualizada, de manera que se requieren controles rigurosos y periódicos con el fin de ajustar la medicación cada cuatro o seis semanas generalmente.
En los análisis se controla el grado de coagulación de la sangre y el índice INR, cuyo valor deberá estar entre las cifras 2 y 3 sin tener en cuenta los casos especiales.
Recomendaciones generales
- Tomar el medicamento todos los días a las mismas horas sin cambiar nunca la dosis por su cuenta ya que puede resultar peligroso para su salud.
- Tómelo mejor una hora antes de las comidas.
- Asegúrese, anotándolo si es preciso, de que ha tomado la dosis diaria.
- No se salte sus citas de control.
- Evite los cambios bruscos en la alimentación, pero en general lleve una nutrición variada.
- Evite las bebidas fuertes
- Consulte con su médico si debe tomar un medicamento nuevo.
- Si acude al dentista o a realizarse pequeñas intervenciones, recuerde siempre al especialista que está tomando este tipo de medicación.
- En caso de fiebre o dolor puede tomar analgésicos como parecetamol.
- Las vacunas no están contraindicadas, pero hay que evitar las inyecciones intramusculares.
- Recuerde llevar su medicación cuando tenga que salir de viaje.
En caso de olvido
- si está dentro del mismo día tómela en cuanto lo recuerde.
- si es el día siguiente, tome la dosis diaria y añada un cuarto.
- si debe descansar algún día y no lo ha hecho, hágalo el día siguiente.
Buenísimo el informe. Realmente admirada por tan preciosa información. Muchas gracias