La manera más sencilla de tratar el mal aliento

¿Tu boca te hace pasar un mal momento? Aquí te damos algunos consejos para mantener un aliento fresco de manera natural:

• Cepilla tu lengua cuando laves tus dientes. Toda tu boca necesita de un cepillado completo, y no sólo los dientes. Con el cepillo de dientes, cepilla la lengua y el paladar de tu boca todos los días para deshacerte de la acumulación de placa que permite que las bacterias prosperen.
• Usa el hilo dental. El uso de hilo dental deja tus dientes y encías con una sensación de frescura. Cuando las partículas de alimentos se quedan en la boca, pueden pudrirse y también servir de caldo de cultivo para las bacterias. Si limpias bien tus dientes y las encías, ayudarás a que tu aliento huela mejor.
• Cuida lo que comes. Examina tu dieta. Comer hidratos de carbono y proteínas en la misma comida puede causar mal aliento porque los carbohidratos se digieren rápidamente y las proteínas tienden a digerirse lentamente dejando un olor a podrido. Los alimentos y bebidas como el ajo, cebolla, queso, jugo de naranja y refrescos también causan mal aliento por su cuenta.
• Por supuesto, si deseas tener un buen aliento, no debes fumar ni utilizar productos derivados del tabaco.

Existen otros factores y patologías que pueden contribuir a tener mal aliento. Los problemas crónicos en los senos paranasales, por ejemplo, pueden hacer a una persona propensa a padecer de halitosis.
En el caso de las personas que padecen diabetes, su aliento puede tener un olor como la acetona.
Si los problemas persisten a pesar de una buena higiene bucal, se debe consultar con un profesional de la salud para que descarte la existencia de alguna otra condición médica subyacente.