Las rinitis alérgicas son afecciones muy frecuentes que aparecen cada año en las mismas estaciones. Los tratamientos existen, por eso es bueno hacer desaparecer los síntomas, o recurrir a una desensibilización.
Los antiestamínicos y los corticoides
Los pólenes son los principales causantes de las alergias estacionales. Es el momento de recordar que la rinitis alérgica es una enfermedad que se debe tratar. Gramíneas, ácaros, animales domésticos…, sea cual sea el alérgeno, los tratamientos permiten mejorar los síntomas.
Alergia: la rinitis desaparece con el tiempo
Las personas alérgicas tienen la esperanza de ver sus episodios de rinitis distanciarse con el tiempo. Efectivamente, la frecuencia de esta enfermedad crónica disminuye con la edad. Paralelamente, el asma es un predictivo de la rinitis, así como los antecedentes familiares.
Rinitis alérgica: la desensibilización
Estornudos, nariz taponada, picores…, los síntomas de la rinitis alérgica no son graves, y desaparecen con algún tratamiento farmacológico. Pero, cuidado, la rinitis tiene el riesgo de evolucionar hacia una sensibilización múltiple, predisponiendo a padecer asma. La desensibilización es el único tratamiento que permite su curación. Hoy en día este proceso se puede realizar por vía oral.
La rinitis alérgica favorece el asma
Una persona asmática suelen padecer una rinitis alérgica, lo que constituye un factor agravante del asma. Pero, por el contrario, el paciente con rinitis alérgica termina desarrollando un asma. En caso de rinitis alérgica, se recomienda tratar a fondo la afección y buscar posibles indicios de estar padeciendo asma.